miércoles, 18 de noviembre de 2009

QUEEN + PAUL RODGERS - Cosmos Rocks

El error que ha cometido la crítica especializada a la hora de valorar este disco, es considerar que se trata del último disco de Queen.
Esto obviamente, no es así.
Queen desaparece como grupo en el momento en que fallece su irrepetible vocalista, Freddy Mercury y, por este mismo motivo, abandona la formación el genial bajista John Deacon.
El último disco de Queen, incluido en su discografia oficial por derecho propio, es Made in Heaven, publicado después de la muerte del cantante, pero que contenía material que éste había dejado grabado, completado convincentemente por los otros tres miembros de la banda.
Partiendo por tanto, de esta premisa, pasamos a valorar este disco de forma independiente al resto de la discografía de Queen (aunque muy influido por ella, como es lógico).
Utilizan para este lanzamiento, el nombre del grupo, como lógico reclamo comercial; no habrían vendido ni la mitad de la mitad de discos si hubiesen buscado un nuevo nombre, o hubiesen puesto sus nombres en el encabezamiento; Brian, Roger y Paul, por ejemplo.
Se trata de un disco de rock clásico, que alcanza un nivel más que aceptable, con muy buenos momentos (que coinciden en su mayoría con las influencias más claras del sonido Queen), y otros que no lo son tanto, pero que completan adecuadamente el resultado.
La capacidad compositiva y creatividad sin límites del guitarrista Brian May y el baterista Roger Taylor, les llevó a los dos a buscar un vocalista que pusiera voz a sus canciones, y les permitiera seguir haciendo lo que mejor hacen: música.
El elegido fue Paul Rodgers, cantante de bandas legendarias de rock, como Free o Bad Company, y que también tiene publicados algunos discos en solitario.
En definitiva, atesora sobrada experiencia para desempeñar la labor que de él se esperaba.
Innegable la personalidad que imprime al disco, poniendo su sello y su estilo; supone el contrapunto necesario, que aleja las canciones de la inevitable influencia del sonido Queen, y le confiere personalidad propia.
El peso de Brian (sobre todo) y de Roger, dentro de Queen, es muy grande, como también lo era la influencia del bajista John Deacon, retirado de la escena musical.
Entre los tres han firmado algunas de las mejores y más famosas canciones del grupo.
Sirvan como ejemplo We will rock you, Who wants to live forever, Hammer to fall, Now I'm here...., creaciones todas de Brian May; Another one bites the dust, I want to break free, Friends will be friends (a medias con Freddy), propias de John Deacon; o Radio Ga Ga, A kind of magic..., fruto de la inspiración de Roger Taylor.
Y a estas hay que añadir las que han compuesto los cuatro miembros del grupo juntos, como son Under Preassure, One Vision..., así como los dos últimos discos completos (The Miracle e Innuendo).
La cabeza visible (y extravagante) era Freddy Mercury, con su increible carisma y arrolladora personalidad.
Y a pesar de ello, no consiguió eclipsar o quitar protagonismo a los otros miembros, para los muchos seguidores del grupo.
El tema del vocalista que parece "comerse" al resto del grupo, daría para escribir libros enteros (desde los Rolling Stones hasta U2, pasando por Bon Jovi, Nirvana...).
Pero centrándonos en el disco que nos ocupa, hay composiciones ya no solo influidas por el sonido Queen, si no con verdaderos guiños, que resultan cuando menos, curiosos: la guitarra de inicio de Now I'm here en COSMOS ROCKIN, así como algún toque de la época The Game; el break a la mitad de canción con el inconfundible ritmo de bateria de We will rock you en STILL BURNING (por cierto, fantástico solo de guitarra con slide); el estilo de las composiciones para Los Inmortales (Gimme the price, Princess of the Universe...), con la guitarra gritando por debajo y los coros solemnes en WARBOYS; el Dreamers Ball del siglo XXI con CALL ME (el solo de guitarra es casí una continuación del original); el recuerdo a Hammer to fall en C-LEBRITY.....
Pero también hay temas con personalidad propia y el sello del cantante: SMALL (preciosa balada que podría haber firmado cualquier grupo, hasta que hace su aparación la guitarra de May); WE BELIEVE (gran canción); VOODOO (fantástico blues, muy bien interpretado, y con un solo de guitara a la altura de las circunstancias); SAY IT'S NOT TRUE (cantado por Roger y Brian, demostrando que no solo tocan bien sus instrumentos; a lo largo de la dilatada carrera musical de Queen, no fueron pocas las veces que cantaban ellos sus propias composiciones, lo que viene a confirmar el talento y personalidad compositiva e interpretativa de los otros miembros de la banda, y no solo de Mercury; a la canción se une finalmente la voz de Paul Rodgers); y por último, SURF'S UP.... SCHOOL'S OUT (original canción para cerrar un muy buen disco, tanto para los fans de Queen como para los aficionados al rock).

DISCOMETRO: 8
Queda claro que el que tuvo retuvo; y cuando se tiene tanto talento como el que tienen estos músicos, salen buenos trabajos, como este.

domingo, 8 de noviembre de 2009

MIKA - The boy who knew too much

Comenzamos este blog de análisis de discos, con el segundo y último trabajo del inglés de origen libanés Mika.

Llega dos años después del primero, y guarda muchas similitudes con este, lo que se convierte en un arma de doble filo para el artista: por un lado, ha creado un sonido que es su seña de identidad, rápidamente identificable; por otro lado, uno no sabe muy bien cuál de los dos discos está escuchando, porque suenan igual. Hasta las portadas son prácticamente idénticas.

Se trata de un buen cantante y compositor, que domina el falsete, y tiene una gran facilidad para componer canciones descaradamente pop, con bonitas melodías pegadizas; hace que parezca fácil lo que no lo es en absoluto.
De aspecto frágil y enfermizo, abusa de la estética colorista y de dibujos animados, lo que puede restarle algo de credibilidad a su música.

Alcanzó un gran éxito y repercusión con su disco de debut (Life in Cartoon Motion).
Y acaba de publicar este segundo disco que hoy comentamos, siguiendo las mismas pautas que en el anterior.
Son 13 nuevas canciones que, en conjunto, ofrecen un muy aceptable resultado.
Quizás se eche de menos una joya como la última canción del primer disco (Happy Ending), pero en general, se trata de canciones bien compuestas, producidas, que en su mayoría son potenciales singles.
Las referencias a Freddy Mercury y el sonido más comercial de Queen, están presentes en todo el disco, como ya sucediera en el anterior.

El disco abre con WE ARE GOLDEN, que a la segunda escucha ya la conoces de toda la vida; empieza por el estribillo, y tiene unos coros pronunciados y potentes, al más puro estilo Queen; transición perfecta del falsete a la voz normal, y viceversa, lo que es la tónica general del artista.

BLAME IT ON THE GIRLS es una fantástica canción, con un irresistible ritmo contenido; utiliza una caja de voz para sonar ligeramente distorsionado.

RAIN es el primer single, muy comercial, pero no por ello exenta de calidad; impresionante estribillo, en alocado falsete, que se te pega desde la primera escucha (para lo cual, Mika es un maestro); la base de la canción son los teclados (a la par con el piano).

Le sigue DR. JOHN, con un inicio demoledor, con la guitarra, a la que se le une el piano; tiene hasta un punto gospel, con los coros mandando en el estribillo; se echa de menos un break, con los coros y la voz solo.

La primera balada del disco es I SEE YOU, sencilla y bien interpretada, con solo piano y teclados; en esta ocasión, quizás el falsete le resta credibilidad a la canción; le falta un poco más de emoción en el estribillo.

Y llega, para mi, la pieza más destacada del álbum: BLUE EYES, con un aire reggae, y una preciosa melodía en el estribillo; la base está en unos sencillos acordes de guitarra y piano. Muy buena.

Y volvemos al estilo que le ha dado la fama, con GOOD GONE GIRL, que podría haber estado perfectamente en el anterior disco; clara influencia de Queen y la particular manera de componer e interpretar de Freddy Mercury.
El ha declarado que no se considera un gran pianista, pero hablamos de un instrumento en el que no hace falta ser un virtuoso para sacarle un buen partido, al contrario que ocurre con la guitarra, por ejemplo.

En TOUCHES YOU crees, por momentos, que es Freddy Mercury quien canta (salvando las distancias, claro).

La segunda balada del disco es BY THE TIME, mejor que la anterior, con coros muy logrados y una instrumentación muy sencilla (sustituye instrumentos por voces). No hay falsete.

ONE FOOT BOY es un medio tiempo logrado, con una base de piano marca de la casa; le falta darle más protagonismo al bajo distorsionado.

Un nuevo homenaje a Queen con TOY BOY, muy original y simpática, y con una elegante sección de viento. En los coros del final parece que estas escuchando a Freddy, Brian y Roger.

PICK UP OFF THE FLOOR es un swing original y elegante, cantado casi en su totalidad en falsete, con una orquestación lograda, aunque le falta protagonismo; in crescendo.

El disco cierra con LOVER BOY, música de bodebil, alegre, y con coros, como no, a lo Queen, así como el piano, y el propio ritmo de toda la canción.

Aunque haya nombrado en numerosas ocasiones a Queen y Freddy Mercury en el análisis del disco, esto para mi no es un defecto; está claro que los grandes de la música influyen sobre las nuevas generaciones, las cuales les dan un toque de actualidad a su sonido.

DISCOMETRO: 7,5
Se escucha fácil, entra a la primera, con bonitas y sencillas melodías. Aunque después de escuchar el primero, puede resultar un poco repetitivo.
Un buen disco.